miércoles, 17 de enero de 2007

Las diez formas más habituales de robar información personal

En los últimos años se ha producido una auténtica explosión de los sistemas usados para coleccionar, almacenar, compartir e incluso sustraer información acerca de usuarios y empresas.
Los datos personales se han convertido en un gran negocio que puede llegar a ser sumamente valioso para un suplantador de identidades.
En efecto, en los últimos años se ha producido una auténtica explosión de los sistemas usados para coleccionar, almacenar, compartir e incluso sustraer información acerca de usuarios y empresas.
Consciente de ello, Fellowes Ibérica, filial en España del principal fabricante mundial de destructoras de documentos en formato papel y CD, ha elaborado un listado sobre los métodos que los ladrones de identidad emplean habitualmente para robar información personal.
La compañía pretende así que se tomen las medidas necesarias -incluido el empleo de destructoras de documentos- para poner freno a esta práctica tan extendida. He aquí el listado:
1.- Sustraer los datos del cubo de basura es uno de los métodos empleados por los impostores para hacerse con los datos personales de alguien. Para ello, suelen pagar a alguien que se encarga de revolver entre los desperdicios en busca de extractos del banco y de tarjetas de crédito, documentos sobre créditos preaprobados e información sobre impuestos.
2.- Muchos criminales tampoco dudan a la hora de usar la identidad de personas ya fallecidas. Para ello, los suplantadores revisan las esquelas y los anuncios de periódicos relativos a la muerte de alguien, tomando nota de la edad, la fecha de nacimiento y la dirección completa de los difuntos.
3.- Cualquier internauta también puede ser víctima de fraudes, ya que se le puede requerir que comparta información privada sobre su persona para poder acceder a determinadas webs y tiendas virtuales. Los criminales expertos suelen combinar esta información con otra recogida en la Red para, por ejemplo, contratar un crédito a su nombre.
4.- Otro fraude muy extendido es el cambio de la dirección de correo de un individuo mediante el envío de los formularios pertinentes a la oficina postal. Con este método se consigue redirigir su correspondencia (y, con ello, información vital sobre esa persona) directamente al buzón del impostor.
5.- El archifamoso phishing, un método de robo de identidad vía e-mail.
6.- El skimming es otra modalidad de fraude que normalmente se produce cuando un camarero o dependiente obtiene los datos personales de alguien copiando la información de su tarjeta de crédito cuando hace una compra o paga por un servicio.
7.- El robo de la cartera o del bolso es otra vía para la sustracción de la identidad, dado que suelen contener tarjetas de crédito, libretas bancarias y valiosos documentos de identidad -DNI, licencias de conducción, carnets de socio, etc-.
8.- Mucho cuidado con los contactos telefónicos no solicitados. Las llamadas que aseguran proceder de un banco y en las que se solicita la actualización de los datos personales deben ser tomadas con precaución.
9.- No sólo están en riesgo los individuos, sino también las compañías. Mediante el acceso a archivos abiertos al público, muchos ladrones de identidad pueden alterar los nombres de los directivos de la organización y sus direcciones registradas.
10.- Los detalles bancarios de la compañía también pueden ser de dominio público con el fin de que los clientes puedan pagar por los bienes que compran haciendo un ingreso en su cuenta bancaria. Los impostores pueden conseguir las firmas de los archivos públicos y suplantar la identidad de los titulares de esas cuentas.

Noticia sacada de Baquia